31 mayo 2006

25 minutos

Me quedan 25 minutos para arrepentirme, regresar y gritarle que fue una farsa, que no era yo el que hablaba en ese preciso momento.
Decir que mis arrebatos masculinos son parte natural que todos tenemos para cubrirnos y tratar de ser mejores, callar la boca con una bofetada.

Me quedan 25 minutos para corregir lo que en toda nuestra relación siempre fue algo negativo, siempre fue algo de venganza, siempre tratando de lastimarla donde yo sabía perfectamente que ella flaquearía. Si vuelvo ella podría considerarlo, siempre lo ha hecho y, hasta en los momentos en que pensé que de verdad no me amaba comprobé que si lo hacía.
Saltaba cualquier detalle en el que yo hubiera podido dejarle un dolor, una amenaza, un juego psicológico de chantaje, fingía que eran cosas inmunes a ella aunque por las noches la oyera lloriquear y no precisamente por soñar dormida, sino porque le dolía que yo no la entendiera.

Me quedan 25 minutos para que le diga que olvide su decisión, que rompa los boletos, que todo fue inesperado y que ahora yo sería el que trataría de sacar de mí a lo que ella conoció hace muchos años y que por ése yo perdido, enterrado, figurado, alardeado, fue por lo que ella permaneció a mi lado, ayudándome, apoyándome, celebrando mis tonterías que algunas veces comparaba con súper obras al lado de las que ella hacía.

Me quedan 25 minutos para decidir si ella hace su vida lejos de mí, si construye su propia morada como ella ayudó a construir la mía dejándola siempre fuera, congelada, como si tocara y nadie le abriera en un hogar que ella decoró, arregló y puso lo mejor de sí. Ya sabría cómo evitar sarcasmos y fingir que nada ha pasado.

Me quedan 25 minutos para decidir un camino, una ruta de vida, si yo hago la mía como tantas veces la amenacé, como siempre se lo reclamé, como todas las noches lo pensé cuando le miraba entre la televisión, sus quehaceres y trabajo.
Me veía haciendo cosas mejores sin tener que llegar a casa temprano o ver a su familia que tanto le daba la bienvenida sin que yo fuese recibido igual.

La diferencia está en que esos 25 minutos me devolverían esa cadena que yo sólo me até y que bien podría romper.

Si me decido creo que podré hacer que uno de los dos sea feliz.
Hay 25 minutos que hacen la diferencia de vida en un alma.

.....

Creo que ya no eran 25 minutos después de todo.

30 mayo 2006

Cruda realidad

Era alcohólico mi padre, le valía madres si comíamos o no mis hermanos y yo. Siempre que llegaba era de esperarse la ordenadera de cosas que mi madre nos ponía a hacer, todo con tal de complacer al pinche viejo, -que vete por las chanclas de tu padre, que laves los trastes que usó tu padre-, que ayuden a levantar al pendejo borracho que, si de buenas llegaba hasta nos regalaba lo que traía en sus bolsas: Moneditas, corcholatas del bar y una que otra mamada que a lo guey nos entretenía. Malo que llegara de malas porque los madrazos que andaba repartiendo eran parejos. A nosotros por chillones y escandalosos y a mi madre por teatrera y celosa. Era un reverendo cabrón el hijo de Puta.
Ya nadie le quería fiar en la tienda a mi mamá por tanta porquería que debía pagar a tiempo ?claro- el dinero estaba reventándose en las pedas que se traía mi padre, por eso era una chinga que nos mandara a trabajar saliendo de la primaria al mercado municipal. Cargando cosas y limpiando los puestos de los que nos daban para un taco. ?Así nos hacíamos machitos?- decía el imbécil de mi padre, aunque para trabajar él se quedaba de huevón.
Tirar la basura era lo que hacía mejor mi hermano, le pagaban mucho mejor, aunque fuera arrastrando la madre de cosas y botando la basura por todos lados antes de llegar al basurero. Ahí llevaba al bulto de mi hermana.
Yo me chingué más en las carnicerías, aprendiendo a cortar y a vender vísceras.
A veces me encargaba de la berrinchuda de mi hermana, cabrona escuincla, ¡de todo lloraba! ?me tenía hasta la madre su berrido tormentoso, a veces mejor era mi hermano quien se encargaba de cuidarla y curarla de los golpes que daba mi padre. Cada vez que llorara le daba un zape en la cabeza. Creo que por eso quedó tarada por siempre. Se reía solita y hasta nos hacía reír.

Una vez mi madre nos mandó dizque a hacerle mandados a Doña Lupe, tardamos un rato nomás, porque la señora no quería que ensuciáramos su pinche piso de migajas. Ahí me regresé con los huevones y la mensa de mi hermana que le urgía miar en la casa.
Entramos los tres de momento y la pinche impresión de lo raro que ví haciendo a mi madre con mi padre fue de lo más asqueroso que pude ver. Fue como si me arrancaran la pinche inocencia de a madrazo y lo peor de todo, que fueran los cabrones los que me abrieran los ojos.
Mi hermano se paralizó, no pudo entender que el pendejo se estaba cogiendo a mi madre y mi hermana sólo se quedó mirando. Los odié a los grandísimos cerdos, ellos disfrutando y nosotros mendigando.
Creo que mi madre estaba bien peda porque no atinó a cubrirse nada dejando sus carnes sueltas para decir que parecíamos mirones, se reía como una idiota, sólo decía que tenía hambre y le preparáramos unas tortas para ella y mi padre.
Mi hermano se fue a la cocina, dijo que él prepararía las pinches tortas de lo que querían... las risotadas continuaron... a mi hermano le noté sus mejillas rojas no sé de qué chingados fue, si de coraje o pena y se limpió el moco con todo y lágrimas...
Yo estaba encabronado, llevé a mi hermana al baño que siempre estuvo en el patio de atrás.
Adentro risas y gritos como de putas viejas.
Esperé a mi hermana a que terminara con su pinche grito pidiendo papel. Los ruidos eran cabrones ahí dentro.
Cuando volví la única cama donde dormían mis padres y mi hermana estaba con manchas de sangre y de cosas extrañas.
Sólo quejidos en el piso del otro cuarto donde había un caminito cabrón de sangre. Ahí estaban el borracho tirado, sin vida, desentrañado, y mi madre casi debajo de él, con el cuchillo que nos prestaba Don Sebas para sacar las tripas a los cerdos.
Mi hermano, bañado en sangre y con la cara manchada sólo atinó a decir con ojos de cansancio que mi mamá gritaba como si la lastimara el cabrón y que en lugar de que ella se quitara ahí estaba pegada.
Se hartó de lo mismo y con furia corrió al cuarto donde ?jugaban? ellos. Boca arriba él y encima ella, mi hermano sólo pudo atinar a enterrar el cuchillo en la espalda de ella queriendo atravesarlo a él... no tengo la puta idea de cómo lo hizo, pero ambos se desangraron rápido sin reaccionar por la peda en que se encontraban.
Mi hermano ni siquiera lloró, y los tres miramos en silencio cómo se les iba la vida lentamente.

Yo cumplo la pinche condena en éste culero penal. Me vale madres que digan que soy un asesino, y no me importa un carajo que sepan que nos quedamos huérfanos. Alguien tenía que cuidar a mi pinche hermanita y decidí que el cabrón de mi hermano la mantuviera con cuidado hasta que yo salga de éste infierno en el que llevo ya un buen de tiempo. Por lo menos sé que andan bien porque de vez en cuando los dos me visitan. ¡Son unos chingones!

De lo demás? ya veremos cómo nos arreglamos.

29 mayo 2006

Hay momentos para dos

Era amor lo que ella podía sentir por él mas era pasión lo que ella deseaba tremendamente vivir en un momento de locura con o sin él.
Tal vez por accidente o por tentaciones que pone la vida optó por vivir su fantasía.
Su vida seguía normal, con las comodidades que él siempre le ofreció, con los largos viajes que él hacía por grandes negocios. Siempre se quedaba en casa, tomando café con algunas amigas o simplemente dejando que las películas fueran la historia que ella nunca tuvo.
Decidió un día tomar un baño lleno de burbujas, sentirse bonita, mirar las piernas en el vestido corto que tanto halagaba sus formas. Le tomaría toda la tarde el arreglo de su cabello y manos. No haría decoloraciones en su cabello ni tomaría un bronceado a pesar de que resultaba muy tentadora la sensación de lucir diferente, pero tal vez otro día lo podría lograr.
El llegaría 4 días más tarde, feliz como siempre por la realización exitosa de un negocio.
Esta vez ella no dejaría que todo ese tiempo la consumieran los programas televisivos y ventas por cable.

Por la noche, ansiosa por descubrirse nuevamente en las aguas del mundo de gente donde se baila, se flirtea y se busca alguna liviana conversación optó por salir en taxi y dirigirse, primero, al bar de gran clase donde seguro asisten guapos y bellas para pasar un buen rato.
Su entrada era segura, triunfal, dedicada y tras pedir un Manhattan, comenzó a disfrutar del jazz que al fondo le halagaba el perfil a contra luz.

No miró a nadie ?de momento-, sabía que primero muchos lo harían y prefirió dejarse observar como un tigre que se encuentra alejado tras las rejas, dejando que adivinen el resto... ella ha venido sola y tal vez en busca de pareja.
A tres sorbos del martini alguien poco más joven, le ofreció pagar su bebida. Era atrevida la rapidez aunque no se alarmaba de saber que la juventud estaba cada vez más ansiosa por probar y saber si corría con suerte o no. El chico era guapo, sí, conocedor del medio y sin alardes.
Decidió probar suerte en ver qué tanto le podía jugar al vivo y lo invitó a sentarse levemente.
No le incomodaba su presencia, pero tampoco tenía la idea de pasar el rato con él.

Sus pensamientos cambiaron a la mitad de su bebida. Resultó un gran chico.
Empresario, firme, concreto.. Y siguió la conversación. De algún modo, de alguna manera, siempre se termina preguntando sobre el corazón o sus intereses hasta orillarse al sexo.

Ella fue directa, deseaba pasión, algo diferente, algo que fuera anormal a los paradigmas de la pasividad romántica del momento. EL chico la miró, sonrió y llamó a su primo que conversaba con otras chicas , se hizo un círculo selecto de dos chicos y tres chicas y, en un gusto por involucrarse ya la miraban siendo el centro de atención de todos ellos, contando algo gracioso, o filosofando de la vida. Se reían y gustaban de su presencia.
Una buena velada para ser franca, aunque no deseaba hablar todo el tiempo.
Las chicas se despidieron al poco rato y quedó su nuevo amigo con su primo inseparable...su mente se disparó.

Salieron en el auto del chico y su primo manejaba veloz. Era el retrovisor el que le contaba qué tan sensual era su respirar, qué tanto escote se atrevía a mostrar y escuchaba besos y caricias y miraba los hombros tersos, invitadores al manjar que su primo saboreaba sólo de momento. Su turno lo saborearía después con calma... estaba deseoso.
El departamento lucía bien, elegante, de buen gusto y fue tratada como una gran dama, atendida por dos caballeros, quizá parecía haberse enfriado el ánimo pero la música suave, el alcohol en sus cabezas y el cuerpo invitador hacía todo más tentador.

Había besos y caricias y juegos de manos calientes. Ella se sentía reina, les gobernaba la hormona y bailaban a su ritmo. Fue una noche plena de sexo, una noche donde ella tenía sed...sed que finalmente sació en cada uno de los cuerpos que probó. Sintió dos espaldas, dos pectorales, un cúmulo de ansias y respiraciones contrapuestas al éxtasis que ella gozaba. El sueño de su soledad estaba siendo realizado por los que quisieron ser las presas de aquel tigre.
El primo, durante varias batallas se rindió tras su clímax, el otro, a quien conoció primero, resultaría el mejor amante de los que había tenido en el corto tiempo de conocer a su pareja. Dejaron que el primo durmiera y dejaron que esto, ésta vez sólo fuera para dos.
La noche fue muy corta, fue bien aprovechada, fue muy traviesa y plena. El chico no deseaba perderle contacto pero el sueño y el cansancio rindieron su cuenta por fin.

Ella aguardó a su profundo sueño, se desprendió de su mano, besó su frente y sus labios carnosos, acomodó al primo también y le acarició la espalda, como queriendo recordar cada cosa que sus manos tocaran. Lentamente recorrió la recámara, el cuadro al fondo parecía de dos ángeles caídos quedados en una cama que poco les disimulaba sus partes asomadas, musculosas y calladas.
Se vistió en silencio mirando el baño lleno de espejos, acarició las copas cristalinas del bar, apagó la música del recibidor, se colocó sus aretes, miró algunas fotografías, sonrió apagando la luz y salió.

26 mayo 2006

Una empresa amigable

En muchas pláticas de sobre mesa me ha tocado escuchar las virtudes y defectos de los grandes empresarios mexicanos, americanos, europeos y latinoamericanos. Me he dado cuenta del cómo se está pendiente de ellos hasta cuando bostezan y hacia qué lado lo hacen, tal vez eso indique la suerte y la audacia de su buena fortuna. De ser así, bueno, son cosas que me tienen sin cuidado. Creo que cada uno de esos grandes goza de una estrella muy particular, aunque no siempre es una monedita de oro para caerle bien a todos. Tendrán las inversiones y el dinero que deseen pero siempre hay algo que los engrandece más que el brillo de su firma.

Hoy no admiro al empresario, sino al hombre que hizo que una empresa llegara a tener un servicio bueno humanamente hablando. No sé si eso pase siempre pero al menos en éste día pude contemplar unas escenas que de verdad me agradaron bastante ? y advierto, nadie me pagó por ello-. Les contaré:
La empresa a la que me refiero trabaja a nivel nacional, es una de las más importante en redes telefónicas, después de la red Celular. Ambas empresas son propiedad de un solo dueño, hombre con gran fortuna y prestigio. Dicha empresa goza tanto de quejas y demandas por situaciones propias del negocio más comienza a tener una política del trato al cliente bastante especial.
Siempre pago las cuentas telefónicas en el corporativo, ahí donde las oficinas se concentran y, por obvias razones las instalaciones son enormes. Hay bastantes cajas para atender y siempre está medio vacío (o medio lleno) debido al ágil manejo de la tecnología, un pase y el pago se realiza de inmediato.
A veces es cuando pienso en las compañías de gobierno y de cuánto les falta por abrir en sus mentes con cooperatividad, tecnología y servicio.
Servicio humano de calidad y he aquí la razón: mientras, a espera de pasar finalmente a la caja hay que caminar y estar parado algunas veces. Existe una persona de cualidades especiales que está al pendiente de ver cómo nos vamos formando todos; al principio esa mirada la sentía muy rara, no es común que personal de la misma institución vea la cara de angustia que pones al ver la cantidad de gente que hay delante de ti pero tras varios minutos después entendí la clase de servicio que daba: busca a personas mayores o clientes con deficiencias físicas y de inmediato les invita a pasar a una caja especial. Atendida por una señorita digna de ser amiga de Doña Tolerancia.
Personalmente no había caído en la cuenta de ello hasta que me tocó entrar.

Pagué mis seis líneas telefónicas y por distraerme en un folleto que ofrecen ahí mismo no me percaté de haber recogido correctamente los recibos de pago hasta que los conté casi en la salida de dicha empresa. ¡Lío para mí porque sin comprobantes uno no puede respaldarse del pago! ?Dioses, cerebro de pollo... la fila estaba impasable por el orden que se manejaba y el chico que apoyaba a los clientes se me acercó, le conté lo sucedido y me envió a la caja donde la gente de la tercera edad se formaba.
Ahí la señorita en turno supo lo que me había pasado, miró mis pagos consecutivos en su súper mágica computadora y aparecí... Yo ya estoy a la expectativa de que siempre le llaman a uno la atención por equivocarse en algunas aglomeraciones de bancos o servicios. Esta vez, ?mea culpa? y esperaba recibir una mala cara...¡Pues no!, me tranquilizó pacientemente y ofreció una disculpa por no haberme otorgado la otra señorita mi recibo. La chica que me había atendido al principio también pidió disculpas. ¡Esto no se lo espera uno!
Salí por primera vez en mucho tiempo ?contenta y servida? reconociendo la calidad humana al cliente y al trabajador y mirando que, a pesar del lento avance tecnológico que México tiene, poco a poco va haciendo sus pininos y además, yendo de la mano con un trato amable a lo sucedido (pese a que fue mi error).

¡Realmente la tecnología aplicada a la humanidad debe cambiar nuestra manera de actuar ya que, a final de cuentas es para hacer el trabajo más ligero y llevable. Espero que esto no sólo aplique a ésta empresa ni sea un golpe de suerte el mío.
A eso se le llama una Real Atención al Cliente.

25 mayo 2006

Reloj no marques las horas...

He querido contarles algo que me contaron a mí y que en algún momento me hizo reflexionar:

"En una de las paredes de mi cuarto hay colgado un hermoso reloj antiguo que ya no funciona.
Sus manecillas, detenidas casi de siempre, señalan imperturbables la misma hora: las siete en punto.
Casi siempre, el reloj es solo un inútil adorno sobre una blanquecina y vacía pared. Sin embargo, hay dos momentos durante el día, dos fugaces instantes, en que el viejo reloj parece resurgir de sus cenizas como un ave fenix.
Cuando todos los relojes de la ciudad, en sus enloquecidos andares, marcan las siete, y los cucus y los gong de las maquinas hacen sonar siete veces su repetido canto, el viejo reloj de mi habitación parece cobrar vida.
Dos veces al día, por la mañana y por la noche, el reloj se siente en completa armonía con el resto del universo.

Si alguien mirara el reloj solamente en esos dos momentos, diría que funciona a la perfección ... Pero, pasado ese instante, cuando los demás relojes acallan su canto y las manecillas continúan su monótono camino, mi viejo reloj pierde su paso y permanece fiel a aquella hora que alguna vez detuvo su andar.

Y yo amo ese reloj. Y cuanto más hablo de él, más lo amo, porque cada vez siento que me parezco más a el.
También yo estoy detenido en un tiempo.
También yo me siento clavado e inmovil.
También yo soy, de alguna manera, un adorno inútil en una pared vacia.
Pero disfruto también de fugaces momentos en que, misteriosamente, llega mi hora.
Durante ese tiempo siento que estoy vivo.
Todo esta claro y el mundo se vuelve maravilloso.
Puedo crear, soñar, volar, decir y sentir más cosas en esos instantes que en todo el resto del tiempo. Estas conjunciones armónicas se dan y se repiten una y otra vez, como una secuencia inexorable.
La primera vez que lo sentí, trate de aferrarme a ese instante creyendo que podría hacerlo durar para siempre. Pero no fue.

Como a mi amigo el reloj, también a mi se me escapa el tiempo de las manos.
...Pasados esos momentos, los demás relojes, que anidan en otros hombres, continúan su giro, yo vuelvo a mi rutinaria muerte estática, a mi trabajo, a mis charlas de café, a mi aburrido andar, que acostumbro a llamar vida.
Pero sé que la vida siempre cambia a otra cosa.

Yo sé que la vida, la de verdad, es la suma de aquellos momentos que, aunque fugaces, nos permiten percibir la sintonía con el universo.
El reloj marca lo rutinario que puede ser o lo mejorado que un tiempo avanza, aprovechándolo y siendo mejor cada vez."

¿Como ven?

24 mayo 2006

Mis 7 YO

Un vil copy&paste:

En la hora más tranquila de la noche, cuando estaba ya medio dormido, mis siete Yo se sentaron a conversar en voz baja.

Primer YO:
Aquí,en este loco, he vivido todos estos años sin tener otra cosa que hacer sino renovar su dolor durante el día y recrear su tristeza por la noche.
No puedo soportar por más tiempo mi destino y me rebelaré.
Segundo YO:
Tu suerte es mejor que la mía, porque a mí se me asignó ser el YO alegre de este loco.
Yo río su risa y canto sus horas felices y con pies tres veces alados danzo sus más luminosos pensamientos soy yo quiendebe rebelarse contra una existencia tan fatigosa.
Tercer YO:
¿Y qué tendría que decir yo entonces ¿Yo amoroso, encargado de la antorcha ardiente de pasiones salvajes y fantásticos deseos?
Soy yo,el YO enfermo de amor, quien se rebela contra este loco.
Cuarto YO:
Entre todos,yo soy el más desdichado, porque nada me fue dado sino el abominable odio y el destructivo rencor.
Soy yo, el YO tempestuoso, el único nacido en las negras cavernas del infierno quien debería protestar de tener que seguir al servicio de un loco.
Quinto YO: No,soy yo, el YO pensante, el YO imaginativo, el YO hambriento y sediento, el único condenado a vagar sin descanso en busca de cosas desconocidas y de cosas todavía no creadas. Soy yo el que debe rebelarse.
Sexto YO:
¿Y yo? Soy el yo trabajador, el insignificante obrero que con sus manos pacientes y sus ojos anhelantes transforma los días en imágenes y da a los elementos amorfos formas nuevas y eternas.
Soy YO el solitario quien debe rebelarse contra este loco.
Séptimo YO:
Qué extraño es que todos quieran rebelarse contra este hombre por tener cada uno de un destino determinado que cumplir.
¡Ah, ojalá fuera yo como uno de ustedes y tuviera también un YO con un determinado destino! Pero no tengo ninguno.
Soy el YO sin ocupación, el que se sienta en silencio, vacío de tiempo y espacio, mientras otros están ocupados creando la vida.
¿Sois ustedes o yo, amigos, quien debe rebelarse?
Cuando el séptimo YO hubo hablado, los otros seis lo miraron apenados pero no dijeron nada. Y cuando la noche se hizo más profunda, uno tras otro se fueron a dormir arropados en una nueva satisfecha sumisión.
Pero el séptimo YO permaneció despierto mirando la nada que hay detrás de todas las cosas...
Vanas son las creencias y doctrinas que hacen desventurado al hombre, y falsa la bondad que lo lleva a la tristeza y a la desesperación, porque el fin del hombre es ser feliz, enseñar a los demás el camino de la felicidad y predicar este evangelio donde quiera que vaya.
Khalil Gibran

23 mayo 2006

Un granito de fuerza

Andando de vaga en lecturas igual de vagas encontré esto que, aunque suene redundante para muchos lectores, nunca está por demás darnos un F5, una buena actualizada a nuestra mentecita programable.

La carencia afectiva es un mal que afecta a todos los rangos de edad, culturas y clases sociales. Es mucho peor que la gripe, que viene y se vá, o un mal que mata de inmediato.Es un mal que va consumiendo despacio a las personas....
La indiferencia de la sociedad actual de cara a los problemas del mundo, hace que las personas se sientan solas y carentes. Muchas veces, preferimos cerrar los ojos a lo que pasa a nuestro alrededor en lugar de enfrentar la realidad de la vida de los demás, con sus problemas.

Existen cada vez más personas solitarias cuanto más crece la población. Las personas tienen sed de amor. El problema es que rara vez quieren ser fuente. Recibir mucho y dar lo que se cree que la otra persona merece.
Y en ese engranaje hay mucha gente infeliz.
Entonces se corre de un lado para el otro.
Algunos intentan encontrar compensación a nivel profesional; Otros tantos en religiones, creencias, el sexo es una buena fuga también...en un sinfin de cosas.

Más que hablar, necesitamos vivir. El día que las personas comprendamos que la solución está dentro de nosotros mismos, entonces el mundo tendrá una oportunidad para salir de éste caos.

Si quieres ser amado... ¡AMA!
¿Quieres recibir una sonrisa?... ¡SONRÍE!
¿Quieres recibir e-mails?... ¡MANDA! (que no sean spam) ¿Quieres cariño?... DÁ TERNURA HASTA NO AGUANTAR MÁS.

Tal vez no funcione inmediatamente.
Es un remedio que necesita de tiempo para comenzar a surtir efecto.
Pero, cuando estés curado interiormente, vas a ser otra persona, de forma tal que será imposible no recibir en retorno la felicidad que repartiste.
Tenemos la manía de querer comprarlo todo.
Pero muchas cosas en la vida necesitamos plantarlas, cuidarlas y cosecharlas con nuestras propias manos. No todo se vende y se compra, y el afecto es parte de esas extrañas cosas.
¿No amamos a Dios por que Él nos amó primero? Entonces, vivamos de manera que podamos ser los primeros en dar afecto, amor, atención.

Seamos los antídotos del odio y de la indiferencia. Todo lo que venga después, será compensación.

Estaremos contribuyendo así para una sociedad más humana, más justa y más equilibrada.

Estracto tomado de Leticia Thompson. Animos de la vida.

22 mayo 2006

Rutina sin opción

Un día, un becerro atravesó un bosque virgen para volver a su pastura. Como era un animal y no podía darse cuenta, abrió un sendero tortuoso, lleno de curvas, subiendo y bajando colinas para llegar donde quería.
Al día siguiente, un perro usó ese mismo sendero para atravesar el bosque.
Después fue el turno de un carnero, jefe de un rebaño, que viendo el camino marcado hizo a sus compañeros seguir por allí.
Más tarde, los hombres comenzaron a usar ese sendero: entraban y salían, giraban a la derecha y a la izquierda, descendían, se desviaban de obstáculos, quejándose y maldiciendo, con toda razón. Pero no hacían nada para crear una nueva alternativa.
Después de tanto uso, el sendero acabó convertido en un amplio camino donde los pobres animales se cansaban bajo pesadas cargas, obligados a recorrer en tres horas una distancia que podría haber sido vencida en treinta minutos, si no hubieran seguido el sendero abierto por el becerro.
Pasaron muchos años y el camino se convirtió en la calle principal del poblado y, finalmente, en la avenida principal de la ciudad.
Todos se quejaban del trayecto porque peor no podía ser. Mientras tanto, el sabio bosque se reía, al ver que los humanos tienen la tendencia a seguir ciegamente los caminos que ya han sido abiertos, sin cuestionarse nunca si esa es la mejor elección.

Contenido tomado de escritos breves Paulo Cohelo.

19 mayo 2006

Herida de muerte

Ahí se encontraba ella, tendida, olvidada. Recordando lo que había sido un día diluyendo la causa de su muerte. Su vida se apagaba.
Ahí se encontraba ella, ahogada en su propia sangre, helada, temblando, mirando cómo algún tiempo atrás le habían castrado, dejándola mutada de su sentir, del éxtasis. Privada de un sentir que era primordial para ella y que ahora sólo quedaba en el recuerdo de su mente que poco a poco se iba vaciando.
Ahí estaba ella ahora, recordando que poco después de que se bajó de ése auto metió la llave al cerrojo de su puerta, en automático, en robot, tratando de resistir que no asomara la sangre que ya brotaba del herido corazón que salía de sus carnes.
Un tiro de gracia que no había hecho efecto hasta que de la boca de un verdugo se encarnó y reafirmó la herida.

Poco a poco fue subiendo las escaleras, deshilusionada, agonizante, resistiendo...

Le inundaba el cerebro y los gratos recuerdos que había forjado pensándose viviendo con un amor, con un corazón, con alguien que erróneamente creyó que era lo que el destino le había designado en un acto de tregua y paz para con ella. Creyó que había una familia esbozada en un sueño de papel. Pero se equivocó...
Era una pelota en juego del destino que nunca le ofreció más opciones por decidir.

Llegó a su sala, gateando, moribunda, desangrada.

Poco lloró por lamentar su destino, ya el dolor impregnaba más su ser en rojo vivo.

Platicó un poco con su corazón agonizante, animándolo a que se resignara a vivir latiendo sólo por latir. Ya no tendría más mentiras qué decirle para que albergara alguna esperanza de inundar su cuerpo de vida. Vivirían ambos tan sólo por obedecer las leyes de la vida.

Así, recostada en su cama, decidió morir, dejar brotar los destellos de la poca vida que quedó guardada en algún momento para alguien que nunca, nunca en su vida viviría para y con ella.

Así murió...
Así decidió vivir al otro día.

18 mayo 2006

Series de moda


Sí, increíblemente una novela puede durar el tiempo que mantenga a la expectativa al televidente, y al final sabremos que termina de manera linda con un suspiro pero una serie siempre nos saldrá con situaciones que jamás esperas.
Hoy en día, diversas cadenas de tv han sido las encargadas de la difusión tremenda de series donde el romance o la acción predominan en sus más esplendorosos puntos.
Así es como hemos conocido alguna o todas las temporadas de Desesperate Housewives, Lost, 24, Friends o Sex in the city.

Pero he de comentarles que hay una en especial, a la que me volví adicta literal, que me hizo reflexionar sobre situaciones que vivimos en el día a día. Sale de lo ordinario y nos presenta otra perspectiva de los Paladines de la Justicia.
Me refiero a la serie C.S.I. (Crime Scene Investigation) Escena del Crimen.
¿No la conocen? Les cuento:
C.S.I consiste en un equipo de criminólogos forenses con lo último en la tecnología y métodos científicos para deducir y dilucidar de manera gráfica y lógica los crímenes de toda clase de naturaleza que se dé.
Si esto existiera en México, créanme que sería el temor de los malhechores pero no va más allá que de una bonita serie con buenas intenciones.
La serie es una mezcla entre misterio, drama, una pizca de suspenso y ligeros brotes de humor. La trama te mantiene en el razonamiento de lo que va sucediendo y se expone de manera oscura para que uno mismo saque conclusiones también.
Estos policías-científicos nos dan a detalle datos importantes que, en el momento de un crimen, sirven de evidencia y dan la pauta para esclarecer el misterio y, de ser posible, de llegar al asesino. Claro, no olviden que en la tv siempre hay mentes creativas y deductivas que se representan en un protagonista. Ahí hasta un suéter sucio puede ser elemental y super héroe.
La serie ha tenido tal furor que ante cinco temporadas se tuvo que multiplicar ?la escena del crimen?, así hay C.S.I. Las Vegas, C.S.I. Miami y mi favorita C.S.I. New York. El soundtrack es espectacular.
Culturalmente en Estados Unidos logró un alto índice de postulantes a carreras forenses y, aunque suena un poco fantasioso pero positivo dio buenas ideas en el proceso de inventos para rastreo de criminales deforma genial.
C.S.I., la serie que se dedica a seguir las pistas que deja el asesino para resolver cómo muere la víctima es recomendable para chicos de 12 años en adelante ya que, en algunas escenas, no se muestra lo crudo del asunto pero si puede tener un impacto visual en algún momento al mostrar el cadáver después de una autopsia.
Como dato curioso sobre uno de los ?fans? de la Serie diré que fue Quentin Tarantino quien organizó un especial de 2 horas cuando concluyó la quinta temporada de Las Vegas. Es un incondicional de ésta serie y por tal admiración escribió y dirigió el capítulo llegándose a conocer con ?una pequeña reciente película de Tarantino?. Ha sido la emisión con mayor público a la fecha.
Ya me dirán ustedes cómo se pueden pasar el tiempo cuando no tengan la opción de ver o rentar dicha serie. Les aseguro aprenderán muchas cosas.

17 mayo 2006

El secreto

La sensacion de haberse dejado tocar por otro hombre le hizo despertarse de subito. Quería ocultar a los ojos de Ruben su gran realidad. Fingiendo dormir, a espaldas de el, se acurrucaba entre sus piernas y brazos de manera que pudiera evitar cualquier roce.
Deseaba estar dormida y evitar las futuras interrogantes sobre la fiesta de anoche. No sabria fingir diciendo que unicamente habia mujeres en el lugar. Que su mejor amiga se encargo de reunir a muchos que en otros tiempos habían convivido demasiado. Que un viejo amor reviviooy se volcó en una mera pasion que le desperto sensaciones que haca mucho no sentia con Ruben.
Y recordo el momento.
Re-haciendo las palabras y miradas que la llevaron a humedecer su interior, que la invitaron a probar besos en el pecho masculino de manera torrencial. Al momento de repasar el suceso, trataba casi de no respirar, como si en el jadeo de su recuerdo fuera a delatarse por si sola al sentir las grandes manos de aquel hombre recorrerle sus muslos bien torneados bajo la falda elegante que disimulaba bien su cintura.
No se resistio, y en su mente se preguntaba porqué un NO ni siquiera habia salido de su boca, era claro que se la habian sellado en un beso carnoso de aliento excitante.
No recordaba la cara que su amiga hubiera puesto al verle salir con el viejo amor, simplemente deseaba sentirse viva, gritar, presumir sus caderas en un movimiento cadencioso de trote como el jinete que lleva a su caballo a lo inconquistable; aquel cuerpo viril pleno de vigor y calentura deseable le habia prendido más de lo que ella podia controlar.

Ruben desperto, como si ella lo hubiera contado a voz en cuello y se sumio bajo las cobijas recordando el olor que ese hombre dejo en ella, recordando la marca que solia hacerle en el interior de su muslo izquierdo.
Ruben salio al banio y fue oportunidad para ella recordar cuantas veces llego al climax con tan solo rosarle con las yemas de los dedos la nuca, viajando por la espalda y trasladandose por los montes ocultos que su vientre ofrecia.
Deseaba revivir todos esos momentos tan pronto se fuera Ruben a trabajar.
Asi que suspendio la humedad de su mente y preparo el desayuno.
Tras varios monosilabos que emitio hacia Ruben dejo el plato en el comedor aunado a un beso en la frente.
Hundida en el pretexto de la desvelada, se retiro a la recamara. La manos se internaron en su bosque, aguardaba ansiosa el instante en que oyera cerrar la puerta para comenzar un frote despacio donde anoche existieron caricias y besos. Revivir pedazo a pedazo el terreno de su piel la enloquecía de pensar que su fantasia la estaba volviendo a tomar y le gustaba. Sus mejillas lucian rosas, con color ardiente en cuanto oyo las pisadas de retirada.
Autocaricias venidas del cielo le dieron el placer que necesitaba saciar. Jadeaba, gritaba, gozaba y, en un instante de furor, dejo ir cuanta fuerza habia juntado en un cumulo de energias sensuales que la volvio a su mundo real tras el paso de los minutos de extasis.

Su cuerpo quedo nuevamente dormido.

Al cabo del mediodia, tras un estiron de gatita mimada, asumio el rol de todos los dias; guardo con cerrojo su pequenia-gran aventura y siguio con sus dias y sus respectivas noches al lado de Ruben.
Cada tanto de tiempo remoto solia abrir ese recuerdo y abrirlo en la soledad de la alcoba como una posibilidad de escape a la rutinaria vida sexual que Ruben y ella casi jamas tenian.

16 mayo 2006

Regalo cumpleaniero

En recientes noticias he escuchado que Fidel Castro desmiente la teoria de tener jugosas cuentas bancarias fuera de Cuba. Reta al Presidente George Bush, a la CIA y al FBI a que se lo encuentren y, de hallarlo dice que se los regala.

Bueno, puedo decir que nada me iria tan mal a mi como un regalo de cumpleanios de miles de dolares: Senior Fidel, un costalito nomas!

Hace muchos, muchos anios, en una tierra lejana, mi mami consentida comenzo en la madrugada de un Lunes a tener contracciones, muy, muy duras, al grado de que se tomo de dos muros y dijo que siempre no, que ya le agradaba la idea de tener un bebe porque dolia mucho.
Cuando naci, la enfermera me arropo y me llevo al regazo de Matita, le dijo que yo habia sido una ninia regordeta y de color rosita.
Mama queria un ninio.
Con el tiempo me educo y me ensenio las cosas maravillosas que la vida tiene y a cada cumpleanios ella ha sido la primera persona en despertarme con un abrazo tierno y lleno de amor, recordando cuanto paso para que yo pudiera estar bien.
Hoy no pudo suceder lo mismo debido a las circunstancias dificiles de la vida. Hay que trabajar y salir adelante. Hoy la extranie como nunca, mas Periko se dio a la tarea de usar la valiosa tecnologia y mandarme un gran, gran recado de felicitación. En el escribio Matita y Papa una palabra de amor y felicitacion. Eso significa mucho para mi.

Mejor regalo de cumpleanios no puedo haber tenido! -Aunque extranio abrazar a los mios-.

Ando cursi.

Hoy es mi cumpleanios y me encargue de que lo supieran mis peces, Loko y Pepos, mis periquitos, mis plantitas y ustedes.

No se por cuanto tiempo pueda uno vivir, asi que si no pasa otro cumpleanios mas, prefiero que se acuerden mucho de este.
Todos lo sabran, ya lo veran!

¡Feliz cumpleanos a mi.!
¡Muuuuuuuuuuuua!
Notita de disculpa:
Aun no encuentro como modificar lo de los acentos. Mientras los quito y escribo sin acento ni n con palito arriba.

15 mayo 2006

Recuerdos infantiles

Esa niña que tanto se divirtió con él, siempre le guardaba una enorme admiración.
Esa niña que siempre le miraba, le suspiraba y le esperaba cada atardecer mirando a través de la ventana.
Ella recordaba mucho su niñez, donde le enseñaba cómo cantaban los grillos, de donde salían los sonidos de la noche para que no lo llamara y temiera que algo feo se apareciera de repente.
En mucho le agradecía que fuera totalmente inocente. Que a cualquier accidente él tratara de consolarle y mostrar que no siempre el dolor es algo malo.
El, lleno de orgullo, sabía que podía luchar valiente. Y mostrarle que derribaría gigantes en la oscuridad.

Al dar jirones de manecilla tiempo tras tiempo:
Ese chico con el tiempo se volvió hombre, y llamaba a su amiga, la niña consentida.
Ambos, blancos de mente, sabían que su mundo era el campo, aquel río de plenas aventuras y charcos de lodo. Entendían que los tiempos de trabajo y los de recreo tenían el espacio adecuado.

Ella crecía y él maduraba.
Ella aprendía, algunas veces con llanto, otras con curiosidad y otras más por la vida misma que el instinto da.
El enseñaba, se aventuraba y conocía, compartía lo aprendido, miraba a la vida con ojos naturales.
Y cuando ambos supieron que la vida iba más allá de unas casas de campo, en provincias tranquilas, quisieron hacer planes, cada uno en su tiempo, para salir y vivir y contarse historias diferentes.

El deseaba emigrar, conocer otros cielos, otros instantes. Ser el marinero que su padre vio de pequeño en él. Enfrentar a dragones y sirenas sin querer ser héroe más que de su embarcación pequeña.
Ella anhelaba sanar, ser la princesa que levanta al enfermo tan sólo en un toque de amor.
Ambos miraban la vida como un cuento al que comenzaban a leer de inicio.
Ambos sabían que en el cuento habría hojas por leer buenas y hojas por leer cansadas.
La vida les cambiaría cuando los tiempos comenzaran a acelerarse.
El padre de él lo mandaría lejos al cumplir los 17.
El padre de ella la enviaría a uno de esos institutos donde se aprende a ser toda una dama.
Y el tiempo los separaría.

Y en sus mentes ambos se recordarían.

Y la ironía de los tiempos haría que se juntaran de nuevo.

Ahora ella es enfermera.
Ahora él ya es un anciano.
Ella curando su senectud, acompañándolo en una última aventura.
El agradeciendo su benevolencia, recordando los tiempos y proclamando una pronta muerte para que dejara de ser una carga pesada.
Fueron amigos de infancia, y amigos de un tiempo que se perdió en un lugar de la provincia, donde siempre las historias perduraron como los típicos cuentos de hadas, con brujos y buenos, con hadas y animales y tiempos mejores que guardaron como esos libros en las bibliotecas de su corazón.

12 mayo 2006

Carta al Inquilino

Señor morador:

Gustaríamos de informarle que el contrato de alquiler que firmamos hace billones de años, está venciendo...
Precisamos renovarlo, pero tenemos que observar algunos puntos fundamentales:

Ud. necesita pagar la cuenta de energía.
¡Está muy alta! ¿Cómo Ud. gasta tanto?

Antes yo le daba agua en abundancia, hoy no dispongo más de esta cantidad. Precisamos renegociar el uso y medirla adecuadamente.

¿Por qué algunos en casa comen lo suficiente y otros están muriendo de hambre?...
El campo es tan grande... Si cuida bien de la tierra va a tener alimento para todos!!!
Ud. cortó los árboles que dan sombra, aire y equilibrio. El ambiente se sobrecalienta.
El sol está muy caliente y el calor aumentó. Ud. debe replantar nuevamente...

Todos los bichos y las plantas del inmenso jardín deben ser cuidados y preservados.
Busqué algunos animales, y no los encontré. Sé que cuando le alquilé la casa ellos existían...

¡Necesitan verificar qué colores extraños hay en el cielo! ¡No veo el azul!

Hablando de basura, qué suciedad ¿¿¿eh???
Encontré objetos extraños por el camino! Si no mal recuerdo la condición de la casa no era ésta.

No ví los peces que viven en los ríos y lagos. ¿Uds pescaron todos? ¿Dónde están?

Bueno, es hora de que conversemos.
Necesito saber si Ud. todavía quiere vivir aquí.
Caso afirmativo... ¿qué puede hacer Ud. para cumplir el contrato?
Me gustaría que Ud. estuviera siempre conmigo, pero todo tiene un límite.
Ud ¿puede cambiar?
Aguardo respuestas y actitudes.

SU CASERO: "La Tierra" .

11 mayo 2006

¡ Ay, Cuando...!


Cuando aceptas y valoras al otro como es,
Cuando tienes fe en su capacidad,
Cuando te entusiasmas con sus sueños,
Cuando sin envidia reconoces sus logros,
Cuando ayudas desinteresadamente,
Cuando no abusas de su bondad,
Cuando estimulas sin adular,
Cuando gozas con sus alegrías.

Cuando sin violar su autonomí­a
le ayudas a ver las dificultades,
Cuando sin herir le aconsejas.
Cuando buscas menguar sus dolores
Cuando perdonas con generosidad.
Cuando escuchas aun lo que no te quiere decir
Cuando reconoces tus errores
Cuando le dices lo que su amistad
Significa para ti.

Cuando no le das importancia a lo que no importa
Cuando te enriqueces con sus otras amistades
Cuando con orgullo hablas del tesoro de su amistad.
Las buenas amistades no aparecen
las cultivas, las construyes.

Tal vez tu no ofreces la amistad perfecta,
Pero tampoco esperes al amigo perfecto.
Si lo haces te encontraras la soledad y la amargura

P.D.: S0lo por hoy elige pensamientos y emociones positivas.
Notarás la diferencia.

Otra P.D. Cuando estoy cursi, escribo cosas como esta... ¡Dioses del Olimpo!

10 mayo 2006

¡Madres!



Palabras más o palabras menos para decir lo mucho y lo importante que es una mujer en la familia es echar otra flor al gran adorno. Y contribuyo con ello.

Felicito de verdad y con el corazón abierto a todas y cada una de las mamás bloggeras y no bloggeras que han tenido la dicha de serlo.

Mi más sentida admiración y aplauso por lograr unión, amor, fé y apoyo en sus hijos y en sí mismas.

Hijos, ¡uníos al gran abrazo que daremos hoy a quienes nos han dado la vida!.
Y un minuto de respeto a todas aquellas que se convirtieron en ángeles cuidadores de nuestras almas allá, donde nos mandan sus bendiciones.


¡FELIZ D�A DE LA MADRE!
*Matita, ¡eres lo máximo!

09 mayo 2006

Otra historia en el banco

A eso del medio día, con las labores del trabajo tuve que ir a un Banco. No sé si sea la mala vibra que ahí impera o la suerte que tengo de presenciar actos civiles contrarios a los que deberíamos hacer.
Tras formarme y tratar de explicarme que la paciencia es la dueña y señora de todas las virtudes para poder caminar a paso lento dentro de un banco atiborrado de gente, pude darme cuenta que poco caso se le hace a los anuncios que ahí dentro se muestran.
Es bien sabido que los celulares no pueden utilizarse dentro de éstas instituciones por diversas causas. ¡Ahhh! Pero no falta alguna personita contreras que “le vale� que eso se diga.

Una chica que llegó tras de mí, hablaba y hablaba por teléfono, a voz en cuello, tal vez deseaba que nos enteráramos de su próxima cita con el chico más sexy de su empresa –¡duh!-.
Todos la miraban y algunos otros, cual partido de tenis, le miraban y volteaban a ver el anuncio, del anuncio a su cara y la chava sin expresión alguna seguía con su charla... Una cajera le comentó que guardara su celular, más con la plática intensa de su próximo affaire, ni si quiera se percató de la llamada de atención... o quizá fingió no escuchar.
-Señora tolerancia-, me decía yo – sé que no eres maga pero haz que se minimice la actitud de la monita ésta... risas a escándalo le hicieron perder el porte de bonita.
¡Noup!, nada pasaba, ni se callaba ni la cola avanzaba. Tras una suerte de 10 minutos más la chica cerró su celular y se salió del banco. ¡ah!, por fin.
Ya a pocos minutos que tocara mi turno llegó una señora, se colocó enfrente de todos nosotros y fingiendo que ninguno de los que estábamos atrás existía sólo buscó la manera de que, en cuanto una caja estuviera vacía, inmediatamente se metiera. Una viejita era la que tenía el turno de pasar y no fue así debido a que la señora, por su santa voluntad fue y se colocó. El caso gracioso fue que de las siete personas que estaban delante de mí, nadie decía nada, todos mostraban cara de molestia, pero nadie tenía el valor de comentar que lo que hacía no era lo correcto. A mí se me hizo raro que se formara así nomás, algo debiera de llevarla ahí y me dediqué a mirar a todos, las actitudes no cambiaban en muchos, desde un movimiento de cabeza como diciendo “no puede ser�, hasta el que, en voz baja, vocifera y maldice pero nada que se atreve a decir ¡fuera de ahí!. Finalmente la viejita nos miró a todos los que estábamos tras de ella y se animó a decirle que ella era la siguiente. La reacción de la señora fue decir –casi a gritos- que ella ya había estado formada desde una hora antes pero que la cajera la había mandado a corregir el formato de pago. ¡Raro!, yo tenía ya casi una hora ahí y nunca ví a esa señora.
Una caja se desocupó y se adueñó del lugar. La viejita sólo nos miró a todos y levantó los hombros y las manos cual caricatura de “Yo no hice nada�... ¡uy!, muchos perdieron la paciencia y comenzaron a quejarse. EL gerente sólo miraba pero no daba una palabra a nadie. Eso tal vez hubiese calmado los ánimos que ya se calentaban.
Y la cereza en el pastel: ¡Apareció la chica del celular!, así nomás llegó y se formó detrás de mi, sin pedir permiso a nadie. Ya no gozaba de simpatía a pesar de ser rubia con cara de actriz. Una persona de atrás la cuestionó del porqué se formaba si ya tenía 45 minutos que no se había formado. Ella comentó que había dejado “apartado� el lugar.
El señor detrás mío, de inmediato contestó que a él jamás le comentó nada y las miradas todas se dirigieron hacia mí... ¡ay! ¡qué rompi!. Me preguntaron si a mí me había comentado algo la chica, por supuesto que salió todo mi veneno a relucir tremendamente: -No, yo no escuché nada, sólo su celular en un lugar donde no se debe contestar-. Un chico de atrás dijo: ¡Vaya! Hasta que alguien le dice algo a “la Barbie�, -risas, alguien aplaudió... yo de plano no quise voltear más, sabía que me había ganado a una enemiga gratuita y le había dado la espalda a Doña Tolerancia también. La impaciencia de todos se volcó con la chica y comenzaron habladurías y comentarios muy crueles que de verdad daban pena ajena con la chica. ¡Dioses, ¿porqué abrí la bocota?... mi turno y acudí de inmediato. Hice los trámites necesarios y lejos de sentirme bien quise salir volando de inmediato debido a la mecha de fuego que se prendió tras mi comentario.
Nuevamente reflexiono y caigo en la temerosa cuenta que en masa podemos ser bastante peligrosos cuando algo llega al límite de la paciencia., que basta con que uno rompa el silencio para que otros se armen de valor.
Ya lejos del banco pensé en dirigirme la próxima vez al buzón de sugerencias:
¿No será bueno que, al menos en los bancos, pongan un disco con música pasiva para calmar los nervios?

08 mayo 2006

Pingüinos a todo color

Este fin de semana fue bastante gratificante, hubo muchas reflexiones y otras más aplicables para el mejoramiento del comportamiento humano.
Entre las tantas chácharas que hice fue rentar la película “La marcha de los Pingüinos�.
Un documental que narra la actividad que tiene el Pingüino Emperador en su diario vivir. De manera personal si se han dedicado a apreciar de cierta forma a la naturaleza y a sus seres vivos créanme que éste documental francés cubre mucho de lo que nos enseña la vida: Una forma de luchar para preservar la especie.
Un angelito me comentó: “ si te quejas de la vida miserable que tienes en tu casa, o con tu familia o trabajo al ver ésta película sabrás que tu no sufres nada a comparación de éstos pequeños seres que tienen tantos depredadores y que poco pueden defenderse�.
Pues sí, la ví y con ella se fue mi corazón otra vez hacia los pingüinos. En algún momento de fortuna me dí a la tarea de conocerlos personalmente en un viaje a la Antártida, son bellos, tiernos, aunque con un olor a pescado ¡intenso!.
Pero volviendo al tema puedo decir que con la narración que se realiza de la marcha de los pingüinos te das cuenta que las ganas de vivir, la lucha por vivir y la satisfacción de vivir siempre te da una buena razón para ser mejor y, sobre todo, para tenerle respeto al destino que cada uno de nosotros tenemos por suerte cubrir.
Yo la recomiendo ampliamente por el tipo tan sencillo de realizarla; totalmente doblada al español o con subtítulos para escuchar el romántico francés la pueden rentar en Blockbuster acompañada de una rica dotación de palomitas. El tiempo no lo sientes pasar hasta que la película ha concluido.
Se ganó un oscar al mejor documental extranjero y, filmado por tres científicos aventureros, déjenme comentarles que las escenas que llegan a tomar son muy loables. Desde la toma de la áurea boreal como el desierto silente y congelado panorama hasta la marcha que realizan los pingüinos hasta el lugar señalado hacen que tengas una verdadera apreciación de lo que no podemos tener en nuestro diario vivir.
NO quiero imaginarme las penurias que tuvieron que pasar los científicos tras el filme que duró todo un año, sin contar la planeación dos años antes, de todo lo que tenían que tomar en cuenta. ¡vaya que si fue una fría labor!
Si no tienen algo más en qué pensar la próxima vez que tengan un tiempo libre les sugiero ver ésta adorable película. Ya preguntaré sus comentarios después de que la vean

¿Están de acuerdo?

Que tengan un buen inicio de semana.

05 mayo 2006

Noticias a mis pensamientos

No sé si deba alegrarme porque nos ha llegado el fin de semana o entristecerme por saber todo lo que ocurrió durante ella.

Por varios días, como una tuza, me he metido al trabajo en plan de interna, poco ha faltado para que la sala de juntas la acople como mi segunda cama –muy al estilo fakir- dura, plana y sin rechinidos. No pude abrir ni siquiera la pagina del diario preferido, por el que me inicié como blogger. A duras penas me paraba al “ñoba� para “polvearme la nariz�.

Es increíble como uno se desconecta del mundo exterior y parece que al volver te has perdido de 20 años de historia humana.

  • La cosa es que Don Boss y los demás secuaces –incluyéndome a mí- nos metimos a cuentas, gráficas, reportes, status y cosas propias de una oficina ; los cierres de mes e inicios de semana son tan tenebrosos para mí como escuchar las pisadas de una araña... (sí, me las imagino ¡te-mi-bles!) y dada la circunstancia de ponerme a tono con el resto de los soldados en pie de laburo hice y cumplí con mi deber.

En esas andaba despegada del mundo cuando Ayer por la noche, en que venía camino a casa finalmente, gracias a la bendita tecnología del internet, venía leyendo algunas noticias, de las que me he perdido o ni siquiera he sufrido por ellas hasta ese momentito.

Batallas en una colonia de México, debates groseros en Europa, más muertos de hambre en Asia y peces y aves contaminados por aceites y petróleo derramado... ¡ay!, cómo ha llegado la humanidad a sobre poblar hechos bélicos o autodestructivos.

Intentaba buscar alguna noticia que no me hiciera sentir avergonzada de mi raza si alguna vez me secuestra un Alien y me pregunta porqué nos agredimos entre nosotros. Busque y busque... sección de espectáculos? Mmm, chismes meramente frívolos, sección de cartones o dibujos: un humor de color más oscuro que el que traía...¡nada!, miré una noticia sobre los chips que colocarán a los inmigrantes colombianos para que vuelvan a su país en cuanto termine su permiso para trabajar y me imaginaba a todos robotizados.

La cosa es que, no sé si a final de cuentas sea bueno permanecer en la ignorancia o desconocimiento de lo que sucede en el mundo exterior para que ello no te afecte el sentir del humano por el humano mismo o volverte un ciudadano crítico de lo que sucede pero sin aportar más allá que palabras de debate (sí, la palabra está de moda).

Cierto es que debe uno saber cómo va la vida a nuestro alrededor pues, en muchos casos, depende de ello para la toma de una acertada decisión, sea de un futuro o si llevo paraguas cargando durante la tarde...sin embargo me pregunto si ello no genera una dependencia a saber lo que sucede siempre. Ya incluso en el medio del espectáculo se ha distorsionado lo que es conocer al artista o al político; se llega al grado de que se muestra más de lo que hay, causa sensación el evento de querer saber hasta las horas en que ronca y se rasca alguno de ellos el rabo.!!.

Al final, tras leer algunas cuantas noticias de ciertos diarios me quedé con el pensamiento preciso de saber ¿hacia dónde va el Hombre, la humanidad, con tanta, tanta libre información?

Sólo espero no perder mi capacidad de asombro ante cosas simples y bellas así como tampoco perder la sensibilidad de sentir la muerte de una persona que se ha debatido con otra por las razones que sean.

Cerré toda la información y me puse a escribir esto que leyeron durante el trayecto del metro a casa.

04 mayo 2006

Egoísta deseo

Hay cosas en la vida que de verdad deseamos con todo el corazón,
cosas que simplemente pensamos que son buenas para nosotros,
siendo un poco egoístas son cosas que solamente queremos
que nos pasen a nosotros.
Yo, hoy, deseo con toda vehemencia, necesidad, impulso y egoísmo que tenga el día menos estresante y productivo.
Deseo que no haya gritos ni enfados, que exista una sonrisa de amabilidad.

Deseo estar en un lugar donde solamente tenga una gran vista al mar sin que sude, me asfixie o queme, deseo estar fresca y tarareando una melodía suave y deliciosa.

Deseo que pase un vendedor de billetes de lotería anunciando que gané por haberle comprado un boleto aquella ocasión en el metro.

Deseo tener internet hasta en la pecera de mi casa.

Deseo sacarle la lengua al jefe y a la jefa.

Deseo algo de Tiffany´s.

Deseo tener alas y no trabajar en un circo como Dumbo. Las quiero para volar.

Deseo unas zapatillas de cristal.

Deseo bloggear donde siempre acostumbro comentar.

Deseo que hoy el día sea bueno, simplemente bueno y de provecho.

Deseo despertar ¡Ya!

03 mayo 2006

Un beso de lluvia

Y la lluvia canta aún cuando el sol no ha despertado

y la lluvia toca a mi ventana queriendo ser notada,

da leves toques al cristal para hacerse presente aún en mi alcoba,

y la lluvia entra callada en un descuido al abrir la ventana

refrescando la madrugada de éste día.

¿¡Qué día nos espera!?,

me pregunto compartiendo mi bostezo flojo

a mi almohada calientita, consentida y azul.

Siento que la mañana me invita a un abrazo fresco

convidándome un poco de oscuridad, nacimiento del nuevo día.

Y la lluvia me toca como no queriendo importunar,

En su leve chipi-chipi llega hasta mi piel.

¿Qué día tengo hoy?

Y repaso el itinerario de tareas que cumpliré

como ser humano y como abejita obrera.

No le agrada saberlo a mi camita tibia,

La envidio por quedarse así, quietecita.

Y la lluvia promete allá afuera

Que cuando esté preparada

Me llevará a pasear en ella.

Así callada se volverá mi compañera

Hasta el arribo de mi oficina y de galletas mañaneras.

Un beso y digo “vuelvo�,

Un beso y digo “lo prometo�

Y me pierdo a oscuras,

En la calle

Con la lluvia.