13 diciembre 2006

La Fé

Y enmedio del tumulto, de los empujones, del ansia porque la gente quisiera llegar hasta Ella, escuchando las vendimias y promesas por pagos ofrecidos El pudo observar lo inmenso del lugar, lo grande que no se esperaba que fuera y lo impactante al mirar cuánto de llanto, de risa, de fé había a su alrededor.<<<<<<<<<<
Callado observaba, sin dejar detalle, a qué grado habían otros que de rodillas llegaban al altar. El sabía que lo suyo era simple, que no llegaba al pago máximo como otros lo hacían; pero por dentro estaba pleno, seguro de sí, sabiendo que lo que hacía él ahí mismo como los demás también tenía que ver con un agradecimiento, presentando respetos y añorando ser como Juan Diego... uno de sus hijos más pequeños aunque la edad simplemente no fuese importante.
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Tenía mucho qué agradecer, y mil pensamientos abordaban su mente enmedio de mucha interrogante. Frente a Ella ¿qué le diría primero?, las gracias o lo que necesita con tanto fervor, sería correcto rezar antes que otra cosa o simplemente ofrecerle las mejores flores que compró al vendedor ofrecido por dar más caro que otros, aunque sí, con rosas mejores y de bellos colores.
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Temblaba a medida que se acercaba, el corazón le latía, miraba y no miraba a la gente y sabía que se podría confundir entre la multitud. El tiempo, el tumulto y los rezos lo llevaron en unos momentos más frente a Ella y quedó impactado. No sabiendo qué hacer reflejó primero su cuerpo dos lágrimas enormes que le rodaron por sus mejillas. Sin palabras en absoluto pudo pensarlas pero no articularlas en voz baja siquiera.<<<<<<<<<<<<<<<<<<
Estaba frente a la Virgen de los milagros, la que se tomaba el tiempo para pensar en todos ellos, frente a la virgen de su milagro, la que le concedió la vida o el renacer tras su accidente del ferrocarril. Ya no llegaba por propio pie pero era ayudado manejando su propia silla de ruedas. El corazón se oprimió y fueron lágrimas entonces lo más que pudo ofrecer.<<<<<<<<
¡Gracias Virgencita! Me hiciste el gran milagro y aquí te vengo a ver.<<<<<<<<<<
¡Bendita Seas Madre Santa! Prometo que esto te lo voy a agradecer siempre...<<<<<<<<<<<<
Y así, con breves palabras pero con un sentir que parecía le reventaba en el pecho, la gente lo fue empujando, arrimando hacia la salida. Eran muchos los que debían agradecerle todavía y tener el espacio ocupado era cosa de necesidad para otros.<<<<<<<<<<<<<<<<<
Andando en su braceo cansado estuvo satisfecho, con la mirada diferente. Miraba a su alrededor y en la explanada ahora todo lucía diferente. Ella le había dado una nueva esperanza y una buena oportunidad para seguir adelante.<<<<<<<<<<<<<<<
Salió de ahí con una sonrisa clavada, con una mirada de Fé y con el alma purificada.
Bastaba sentirse cerca de Ella para quedar completamente bendecido por el amor a su Gran Virgencita de Guadalupe.

2 comentarios:

Enigma dijo...

Es curioso Dra. la fe, algo que no vemos pero nos mueve, ya sea por santos o virgenes en Dios como quiera que se llame, etc. esta presente, al menos, en los demas o en nosotros mismos.

Un beso Dra

El Enigma
Nox atra cava circumvolat umbra

The_Saint_Mty dijo...

La fé mueve montañas....