10 febrero 2006

¡Buen día!

Hoy no hace tanto frío como otros de la semana. Quizá sea porque todo parece un poco diferente cuando el humor va bien.
En el jardín las hojas secas hacen ruiditos cada vez que camino sobre ellas, de chica amaba saltar y tronarlas. Casi puede verse una alfombra sutil.
Hay pajarillos que tengo que hacer que vuelen o los piso a mi paso. Buscan ansiosamente alguna masita o cosita por comer. Eso sí, abuzados no se dejan agarrar. En los árboles cerca del teatro donde está el jardín hay unos pájaros negros, como urracas. Brillan de tan negras que están, siempre me saluda una en el mismo lugar. ¿Sabrá que soy la misma de todas las mañanas?.
Finalmente aparece el edificio de oficinas.

- ¡Buenos días señorita!, que tenga bonito su trabajo.
- Gracias Vic, tú también. (Vic es un señor ya grande que se encarga de la limpieza de todo el edificio, todos los días lo invito al comedor a tomarse un cafecín, por lo menos para que aguante el transcurso de su larga jornada). Humilde, un dinero extra por lavar autos le ayuda a mantener a su esposa y a una hija. Orgulloso me mostró el 2 de febrero las calificaciones de la niña. Va en primaria y lleva promedio excelente.

Camino y sonrío. Entro al hall donde el Oficial me recibe de forma amable y respetuosa.
- ¡Ya es viernes Dra. Kleine!, póngase contenta-
- ¡cierto!, bueno lo estaré, lo prometo. (Oficial X. Su larga jornada comienza de pié ante el frío manejando tráfico de entrada al edificio. Guardia de noche y de día. Existen otros dos oficiales haciendo la misma labor. Mantiene a sus dos hijos y esposa).
Sigo sonriendo, el oficial desde que me ve llegar presiona de antemano el botón del elevador para que una vez que esté yo enfrente sólo lo espere. Buen detalle.

Entro al elevador y digo buenos días pero hay silencio espectal, hay dos chicas mirándose, creo que algo les llama la atención en mis zapatos porque no dejan de mirar.
Piso siguiente entra un hombre alto, ejecutivo, bien vestido.
- Con permiso- Y da la espalda presionando el botón del último piso.

Llego a mi piso, salgo y deseo buen día. No me espero a que respondan, imagino están aún dormidos.

Llego a la oficina, ya hay tres personas. Una no saluda, la otra sólo mira quien entró, otro simplemente levanta la mano.

Qué diferencia entre el trato con gente que es Humana y con la que es Robótica.
Sólo espero jamás perder las ganas de desear un buen día aún cuando no sé a qué individuo se lo esté diciendo.

Queridos bloggeros que tengan un buen viernes y delicioso fin de semana.
Sea humanos, cálidos y amables y no se olviden de sonreír.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya querida mía, estás de muchísisisisimo mejor humor que yo el día de hoy. Ojalá te dure, y además me contagies.

Te dejo un besito.

AndreaLP dijo...

Yo creo que el fin de semana me influye porque los viernes siempre llegó de excelente humor y como dices es cierto: hay gente robotizada y gente que gusta del calor humano. Yo soy del 2o. tipo.

Que goces de un excelente fin de semana, Dra!

Anónimo dijo...

Buen día y un estupendo fin de semana. Aca en Los Cabos el clima es un poco frio todavía....

Angeek dijo...

Ohhh, Garfield, mi gato favorito. Esto de Humanos vs. Robots también pasa acá, ni el azul caribeño los pone de buen humor. Por eso me consideran rara avis. Buena consigna la del final del post. Saludos.

Lizette S dijo...

Bonito día!! como dice una frase (no se de quien) Sonrie siempre, porque nunca sabes quien se enamorará de tu sonrisa.

Que pases un buen fin ;)

Lo-que-serA dijo...

¡Qué hermosos post para el fin de semana, Dra! Es bueno recordar de cuando en cuando que cada persona es una isla... en un archipiélago.
Un abrazo.

argos dijo...

Dra.

Un caluroso saludo desde la hermana república de cuautitlánnn!!!

mmmm, qué tal?

Drayden dijo...

seguro que no se olvida eso.

Altamar dijo...

que tengas un buen d'ia :D

Lety Ricardez dijo...

Ay mi Doctora, por eso no me acostumbraría a vivir en la gran ciudad, aquí todavía sale uno repartiendo saludos y vaya donde vaya, siempre le reciben caras amables, abrazos cálidos y sonrisas por doquier, de a deveritas, no le estoy contando cuentos, no es por gracia de uno, asi las cosas ¿como podría uno olvidarse de corresponder?
Besos compungidos para usted, cálida persona rodeada de islas en su oficina

Anónimo dijo...

Una sonrisa siempre ilumina el mundo para muchos y para otros pareciera una mueca extraña. Yo me quedo con la primera y dejo otra en el cajón para lo que haga falta.

Pd. por eso me gusta el anuncio ese de Coca cola del cine, del chico que hasta la plantita revive con su sonrisa.

Un abrazo y buen fin de semana

RAYDIGON dijo...

G.

Super viernes (lo que queda) y mejor fin de semana.

Besitos.

Anónimo dijo...

Uno de tantos males de la vida moderna: la frialdad, la indiferencia, el automatismo del mundo robótico de hoy. Es una válida y hermosa invitaciòn la que nos haces a ser amables, a saludar, a sonreir... al final, los beneficiados seremos nosotros mismos.

Querida Dra Kleine:
Algunos viajes y el trabajo me tienen distanciado del ciberespacio, pero no te he olvidado.

Besos.

stultorum dijo...

Buen fin y buen inicio de semana.

aquí todo pinta cortez.