16 enero 2006

Mi primer propósito del 2006

Todo comenzó cuando un chico se subió a un transporte cualquiera en Azcapotzalco, repartiendo volantes y pidiendo “una pequeña cooperación�para los niños que trataban de regenerarse en las drogas y que se las daban de vagos por las calles de la ciudad.
Muchas personas mayores le daban al chico un peso o dos y éste argumentaba ser el coordinador de dicho lugar. La historia iba en que él juntaba con mucho sacrificio, durante todo el día, monedas para esos chicos y chicas para darles algo de esperanza y comida.

Cuando comenzó a recoger los volantes yo le pregunté si me podía quedar con la propaganda y el chico me comentó que era preferible la cooperación, aunque como todas las personas le seguían con la mirada hice un gesto de que me quedaría con el papelito.
Uno de mis propósitos de año nuevo que me propuse cumplir a lo largo de todo el año fue la de apoyar a personas indigentes.
Ahí tenía la oportunidad dispuesta a la prueba de mi palabra.
No aporté ni un peso al chico aquel, mi idea era donar la ropa que Periko ya no utilizaba; después de todo creció tremendamente y tenía mucha ropa en buen estado que ya no utilizaba y que, en éstos tiempos de frío, en verdad podía ser de ayuda a otros en lugar de permanecer en el cajón.
Así, el sábado por la mañana me di a la tarea de juntar lo que bien podía ser útil y emprendí la aventura a la Avenida de Marina Nacional No.100.
Yo les confieso que temía no encontrar la dirección y más, que cayera en engaños típicos de ésta ciudad.
Con la ayuda de un maravilloso Angelito de la Guarda llegué al lugar.
De zaguán negro y paredones azules se nombraba la entrada como “Casa Hogar ADULAM�.
Ahí estaba un chico que bajaba colchones y cobijas de una camioneta que ya se retiraba...
¡Uy! Y yo con una bolsa pequeña, Dioses...
Me acerqué y como aún conservaba el folleto, le comenté todo desde el inicio. Viendo dicho folleto me miró intrigado preguntando más sobre aquel que pedía dinero en los transportes.
Rodrigo, voluntario y coordinador de ADULAM, negó rotundamente que ése chico, que pedía dinero en los transportes, fuera parte de la Asociación y peor, que la propaganda que yo le mostré en copia fotostática no era la original. Ellos portan credenciales y folletos hechos en imprenta, acto seguido me preguntó si me podía “canjear� esa copia por una original que ellos manejan.
Dicha institución no pide dinero de esa forma, la aportación puede ser en especie, por depósito bancario, con recibo deducible o por medio de una aportación mensual, adoptando a uno de los chicos con el programa “Hermano mayor� en el cual, uno puede invitarlo al cine o a cualquier lugar un día de descanso.
Claro que agradeció los juguetes y la ropa, pero sí que noté indignación de su parte al darse cuenta que la gente estaba siendo timada por uno que se aprovechaba de instituciones existentes y serias obrando en su nombre... el estómago me dio un vuelco.
Uno de los chicos, de más o menos 7 años miraba y jugueteaba con el sillón inflable que yo cargaba mientras platicaba con Rodrigo.
- Le miré su cara inocente, esperanzada... lindo niño que no sabe qué será de su futuro... le ofrecí el inflable y muy educado me dio las gracias.
Mi corazón sonó a cristal roto y mi mente volaba, se cuestionaba y al mismo tiempo emitía un gesto de enojo, impotencia... ¡qué se yo!
¿Cómo es posible que exista gente que se aproveche de la más mínima circunstancia para estirar la mano, pedir dinero a nombre de otros y echarse encima lo que uno espera que llegue a manos de esos chicos?.
Muy agradecidos me despidieron y al subir al auto del Angelito de la Guarda me desinflé.
Lloré entre rabietas maldiciendo lo inhumanos que podemos llegar a ser con tal de sacar una moneda.
Por situaciones como ésta la gente buena pierde el deseo de ayudar, de aportar o de que nazca de corazón una buena ayuda.
En fin, tuve tantos sentimientos tan encontrados que cuando ya estaba lejos del lugar limpié mi rostro, sonreí al recordar la sonrisa del pequeño y me prometí no perder la fé con lo que yo siguiera haciendo, me dije en mis interiores: “Promesa, no por esto has de flaquear... seguirás latente en todo el 2006 pero de manera más directa�.
Ningún pillo se sale con la suya al final de cuentas, ¡eso lo sé!


Dejo aquí éstos datos para aquellos que comparten mi fé:
Lugar de Refugio ADULAM Casa Hogar
Marina Nacional No. 100 Col. Anáhuac.
Del. Miguel Hidalgo
Tel: 53.86.55.22
Fax:55.27.38.21
adulam@prodigy.net.mx

Apoyo Línea exclusiva “Hermano mayor� 55.27.97.65
Apoyo con Depósitos bancarios:
HSBC cuenta 400411741-2
BANAMEX cta 4101759 suc. 0649
BANCOMER cta. 451431242
A nombre de ADULAM, A. C.
Apoyo contratando Fumigación y control de plagas,
Conferencias sobre integración familiar,
Serigrafía e impresión Offset,
Y compra de artesanías, CD´s y café.

11 comentarios:

stultorum dijo...

Siempre se tiene la duda cuando alguien te aborda para pedir ayuda en las calles.

Pero es mi dificil no aportar algo cuando ves que son niños los que piden .

Enigma dijo...

... hacer el bien sin mirar a quien versa el dicho, pero hoy en dia gracias a mas de uno de estos crapulas, muchos desisten en querer ser generosos con los demas y es valido.

Felicidades Dra., un beso.

El Enigma
Nox atra cava circumvolat umbra

Altamar dijo...

Oye, se me ocurre algo sobre este post, es algo que tambi'en he pensado... mmm, me puedes enviar un correo a gbvalle(arroba)hotmail.com pa platicar al respecto ?
abrazos

dingercat dijo...

guau. un post con mucho contenido. yo acostumbro ayudar a personas de la tercera edad, o discapacitados que yo creo se arman de valor para salir adelante.. pero luego te encuentras con las señoras llenas de hijos, o los chavos en edad de trabajar bien que andan pidiendo dinero, esta cañon cuando el ser humano pierde su valor.

Aristóteles dijo...

¡Excelente!

El que busca encuentra.

Saludos solidarios.
Aristóteles.

Darth Chelerious dijo...

si, se siente impotencia cuando sabemos de gente aprovechada pero ya les tocará que la vida se encargue de cobrarles todas esas gañanerías

Andrea R A dijo...

La mejor lección que aprendi hoy fue el que hay muchas manos que necesitan ayuda, a veces se nos olvida entre tantas vanalidades, yo se que es tu proposito pero tratare de ayudar a quien lo necesita, se que puedo aunque sea cooperar con algo. Muchas gracias por esta lección y por recordarme que siempre habrá menos afortunados que yo y más aprovechados también...

Mary Carmen San Vicente dijo...

Dra. te dejé una tareíta en mi blog, checa primero y luego ya me puedes odiar con toda calma jeje ;)

Anónimo dijo...

Alguna vez se inició una campaña en la que se incitaba a que la gente que por costumbre dá dinero a los que se encuentran en esquinas o camiones pidiendolo, dejaran de hacerlo y que mejor acudieran a las instituciones establecidas para hacer la donación, aunque sean unos pocos pesos. Y eso era debido a que no se sabe realmente la finalidad que tendrá ese dinero.

Y a mi me ha llegado a tocar ver a los niños que están pidiendo monedas, al terminar el día se meten en las tiendas de maquinitas y se gastan ahí el dinero, en vez de comprarse comida.

Salu2

Anónimo dijo...

Te felicito por el propósito y por llevarlo a cabo y si, es indignante que haya gente que se aprovecha de la buena voluntad y de instituciones para timar a otros.

Saludos

Anónimo dijo...

lei tu blog si krer yo trabajo en casa hogar adulam y kiero decirte ke de preferencia no dones dinero, si los chavos no traen algun producto a la venta y su identificacion, algunos chicos han vivido aqui pero no les gusta mucho tener que obedecer las reglas asi que mejor sesalen y estafan a la gente, pero gracias a personas como yu podemos darnos cuenta y Hacer algo al respecto